posicionamiento internacionalEn el contexto en el que nos encontramos actualmente, donde los mercados se encuentran abrumados por la recesión, cada vez son más las empresas que buscan ampliar sus horizontes. Y es que resignarse no es una opción y entre la búsqueda de soluciones resurge cada vez con más fuerza la exportación. Y dentro de los canales de esta exportación, quizá el más barato y eficaz sea Internet.

Estrategia online para el posicionamiento internacional

Dado el crecimiento de este sector como motor de las decisiones de compra, invertir en el mundo online para internacionalizar nuestro negocio se plantea como la mejor alternativa para sobrevivir. Pero aquí es donde surge la cuestión ¿Cómo puedo darme a conocer en el extranjero de una forma viable a través de Internet?

Antes de empezar con el posicionamiento internacional, debemos hacer despuntar en Internet nuestro negocio en nuestro propio país. Una estrategia SEO a nivel nacional es el mejor punto de partida para colocar nuestra web en los primeros puestos de los buscadores. Así crearemos imagen de marca online y consolidaremos nuestro negocio a nivel digital.

Una vez logrado este objetivo debemos centrarnos en dos aspectos: por un lado traducir adecuadamente los textos de nuestra web al idioma nativo del país al que queremos vender, y por otro lado posicionar dicho contenido con una estrategia de SEO internacional.

Traducción del contenido, cómo hacerlo

Se puede traducir de muchas maneras pero la mejor es la localización de contenidos, unido a una estrategia de SEO Internacional. La localización de contenidos consiste en la traducción de los textos por parte de profesionales nativos o los que conozcan bien la lengua. Así se crearían versiones de nuestra web adaptadas a varios idiomas.

Esta forma de llegar a nuestro potencial cliente es muy efectiva porque sí que tiene en cuenta las formas de hablar, los dobles sentidos y mantiene el tono atractivo y publicitario deseado. Además se indexa perfectamente en los buscadores. Trabajar con profesionales nativos ayuda mucho a hacer entendible el contenido porque se tiene en cuenta expresiones propias del país. Por ejemplo, en Latinoamérica aunque se hable castellano tienen palabras diferentes a las que usamos en España para designar ciertas personas u objetos. Así, mientras en España usamos palabras como coche, falda, camiseta o armario, en Argentina y Uruguay dirían auto, pollera, buso y placard.

Además hay que tener en cuenta los factores del entorno. Y estos son determinantes en la decisión de compra. El motivo por el que un usuario alquilaría un apartamento en la costa valenciana es diferente si éste proviene de Rusia o de Castellón. Por lo tanto hay que crear un mensaje específico para cada público al que nos dirigimos según su entorno sociocultural.